Orégano
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Orégano

Orégano

4,61 €
00319
Peso Neto 11g
Medidas 13.6x4.5x4.5cm

 

Sabores recién molidos. El orégano es un condimento fundamental en la cocina italiana. Utilizar como toque final a tus platos de pasta, pizza, adobos, marinados. Combina muy bien con chile, ajo, tomate y cebolla. Ideal para sazonar sobre el plato ya acabado.

Ingredientes: orégano.

Modo de empleo: el molinillo dispone de un mecanismo de doble molienda. Podrás ajustar el cabezal para seleccionar tu molienda favorita. Para ello, eleva ligeramente el cabezal para una molienda más gruesa.

Formato Molinillo

Material Cristal

Especia Orégano

Tamaño Regulable

Molinillo cristal orégano

El fascinante aroma de nuestro orégano recién molido

¿Has leído la famosa novela Como agua para chocolate?

«Cuando Pedro hablaba, su voz suave y cadenciosa invadía todos los espacios vacíos dentro del corazón de Tita. Esa voz era como el orégano en la comida, con su mero olor, era capaz de darle sentido a la existencia».

¡Qué bien describe el orégano la escritora Laura Esquivel! 

Lo compara con la deliciosa voz del hombre a quien ama la protagonista. Y es que la fragancia del orégano también es así de suave y armoniosa, como una voz llena de amor. Por eso, la aromática presencia del orégano une y da sentido a cada uno de los ingredientes de una receta.

¿Te apetece girar nuestro Molinillo de orégano? Deja que tus propias manos conviertan este sencillo gesto en una fascinante explosión de increíbles aromas y sabores.

¿Por qué es especial?

Lo sabrás en cuanto muelas el orégano. Al instante identificarás su intenso aroma con el del orégano de siempre

Aquel fragante aroma que dormía en el interior de unos tarros de cristal en las despensas de nuestras abuelas. Aquel aroma tan familiar que te recuerda a tu niñez, a aquellas pizzas caseras que tanta felicidad te regalaban en cada bocado.

¿Y su sabor? Persistente. Rebosante de frescura. De calidez. ¡Un sabor inimitable! 

Solo cuando gires el cabezal de nuestro Molinillo cristal orégano podrás entender por qué el orégano de Carmencita es tan especial. 

5 razones para llevártelo a casa

01.

Regulable. Esta característica te permite moler el orégano fino o grueso.

02.

Atractivo diseño. ¡Qué bonito luce este molinillo en tu cocina junto a otros molinillos de esta misma colección! 

03.

Frasco de vidrio. Su envase de vidrio grueso protege al máximo el orégano.

04.

Código QR. ¿Te damos una idea para que cocines con nuestro Molinillo de orégano? ¡Escanea el código que hay en el dorso de la etiqueta!

05.

Comodidad. Por su forma estilizada y su tamaño pequeño es muy cómodo de manejar.

Nos gusta porque…

Nuestro orégano ha crecido en los campos de cultivo de los Andes Bolivianos. 

En lo alto de estas montañas el aire es muy puro, por eso, nuestro orégano crece feliz alejado de insectos, sin plagas ni pesticidas. Unas condiciones perfectas que influyen directamente en su ciclo vital y que le proporcionan un color, aroma y sabor únicos.

Cuando el orégano viaja hasta nuestra fábrica, se envasa con mucho mimo para preservar su alta calidad en el interior de este molinillo. De esta manera, cuando llegue a tus manos podrás disfrutar al máximo de su aromática fragancia y de su sabor tan auténtico.

¿Dónde utilizar nuestro Molinillo orégano?

El orégano combina bien con platos de pasta, carnes, panes, adobos… ¡la lista es casi infinita!

¿Tomas notas de algunas ideas?

  • Las verduras combinan muy bien con el orégano. Hornea calabacín, pimiento rojo, pimiento verde, patatas... ¡la verdura que más te apetezca! Y al servirla, rocíala con aceite, sal y orégano molido al instante. ¡Potencia muchísimo el sabor de las verduras!
  • El infaltable en una pizza. ¡Si utilizas el orégano recién molido, su aroma la volverá irresistible! 
  • Las salsas de tomate son la guinda del pastel para los platos de pasta. ¿Alguna vez has cocinado una salsa napolitana? Con tomate, ajo, cebolla, pimienta, albahaca y orégano recién molido... ¡Deliciosa!
  • Las ensaladas perfumadas con el sabor del orégano quedan riquísimas. Cada pequeño trozo de orégano que explota en tu boca la llena de frescura. 
  • Los aperitivos diferentes a lo de siempre saben a gloria. Este nos encanta: introduce en un tarro de cristal orégano recién molido, albahaca, ajo troceado, aceite de oliva virgen extra y sal. Tápalo y agítalo con energía. Unta una rebanada de pan con la mezcla y añade parmesano rallado por encima antes de introducirla al horno. ¡Te va a encantar!

¿Cómo se usa?

Nuestro Molinillo de orégano posee un práctico sistema de doble molienda que funciona de la siguiente manera:

1. Quita la tapa y ajusta el cabezal del molinillo según el tipo de molienda que desees:

  • Molido fino. Gira el cabezal sobre tu plato y ejerce sobre él una ligera presión para moler el orégano.
  • Molido grueso. Estira su cabezal hasta escuchar un clic. Luego invierte el molinillo sobre tu plato y gira el cabezal.

2. Vuelve a poner la tapa del molinillo. Un gesto simple, pero importante con el que preservar todas las propiedades organolépticas del orégano. 

Cocina lento

Cocinar lento es terapéutico.

¡Busca un hueco en tu agenda! Y da la orden en casa: «Que nadie me interrumpa». 

Toca cocinar sin prisas para conectar con este instante presente. ¿Qué tal una deliciosa y aromática salsa casera de tomate? Puedes utilizarla en un plato de pasta, en una pizza…

Los preliminares son muy importantes, así que tómate tu tiempo para lavar y pelar unos tomates maduros. Añade un aceite de oliva de calidad. Y unos ajos bien picaditos.

Ahora llega el momento del chupchup. Presta atención a su sonido tan característico y a esas incansables burbujas. ¡Son hipnóticas!

¿Añades un poco de sal y azúcar? Y, por supuesto, especias y hierbas aromáticas: laurel, pimienta… ¡lo que prefieras! Pero que nunca te falte orégano recién molido. ¡Mucho! 

Molerlo en el momento de utilizarlo aporta profundidad a la salsa de tomate. Además, al cortar los pequeños trozos de orégano su fragancia tan única despertará todos sus sentidos. 

Después de una hora de cocción lenta, la salsa queda reducida y espesa. ¡Seguro que te van a pedir la receta! No olvides contarles los 3 ingredientes más importantes: tiempo, cariño y muchísimo orégano recién molido.

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