La empresa interpreta el reciclaje como un sinónimo de esfuerzo por cuidar la herencia de otras generaciones. Como una manera de cooperar para sustituir el consumo de ‘usar y tirar’ por la recuperación de aquellos residuos que se pueden volver a utilizar.
Carmencita encuentra muchas razones para reciclar. Por eso, hace un año que puso en marcha una iniciativa a través de la cual colabora con empresas como Realimen, Ambilamp y Ecopilas que gestionan la recogida de residuos.
La empresa de especias ha querido promover una serie de actuaciones encaminadas a sensibilizar a su plantilla sobre la importancia de cuidar y mejorar el medio ambiente.
Se trata de incentivar la recogida del aceite que ya no se va a utilizar más en la cocina y así, evitar que contamine nuestro entorno. También las bombillas y fluorescentes que han dejado de funcionar en casa. O las pilas y baterías que al reciclarlas se logra recuperar muchos de sus componentes para devolverlos al proceso industrial y, de esta manera, impedir que se agoten recursos naturales que son escasos en la naturaleza.
Carmencita recicla. Porque está firmemente convencida de que esta serie de acciones puede representar una pequeña pero importante contribución a la preservación del planeta y de sus recursos.
