Carmencita reducirá en su nueva fábrica las emisiones de CO2 implantando una caldera de pellets.

Todos sabemos que el cambio climático es el mayor reto ambiental al que se enfrenta la humanidad. Por eso es compromiso nuestro y de todos dirigir el desarrollo presente y del mañana hacia la sostenibilidad.

En las nuevas instalaciones de Carmencita, la transformación del modelo energético está siendo prioritaria para conseguir la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Una de las medidas que hemos tomado para ello es la utilización de energía verde a través de fuentes renovables.

En esta línea de responsabilidad compartida, estamos instalando en la fábrica nueva una caldera de pellets que se usará tanto para el agua caliente de las duchas y aseos del personal como para la calefacción de toda la nave y oficinas.

Los pellets son un producto natural cien por cien, catalogado como biomasa sólida. Formado por cilindros muy pequeños, de unos pocos milímetros de diámetro, elaborados a partir de serrín natural seco proveniente de maderas de deshecho de serrerías y reciclaje.

Al quemar pellets también se emite CO2, pero un CO2 que ha sido absorbido previamente por los árboles que han producido los residuos de madera usados para fabricar posteriormente los pellets. Un ciclo cerrado que no aumenta el CO2 total del planeta.

Los pellets no contienen aditivos, ya que se utiliza la propia lignina que contiene el serrín como aglomerante, comprimiendo el serrín a una alta presión, lo que hace que los pellets tengan una composición muy densa y dura y por tanto un gran poder calorífico.

Las emisiones de CO2 que se producen, al proceder de un carbono retirado de la atmósfera en el mismo ciclo biológico, no alteran el equilibrio de la concentración de carbono atmosférico, y por tanto no incrementan el efecto invernadero. Su uso contribuye a reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera.

Este combustible no contamina y no es tóxico, así que si se derrama se puede limpiar con una simple escoba. De hecho, los pellets son también usados para realizar camas para animales, por ejemplo en las cuadras de caballos, por ser un producto natural muy absorbente y limpio.

Esta nueva iniciativa energética se suma a la estrategia de sostenibilidad implícita en nuestra filosofía de conservación y protección del medioambiente y con ella queremos reducir cada año la emisión a la atmósfera de más CO2 nocivo para el equilibrio del planeta.